No soy supersticioso. Curioso que un martes 13 haya estado tan cerca de la muerte...fue por la mañana, paseando por Gran Vía, da guso pasear por la ciudad con este tiempo que hace, si al final Al Gore va a tener razón, parece que estamos en verano todavía...Bueno a lo que iba...Pasado Callao, cerca del Zara un perro del tamaño de un Vitorino ha estado a punto de arrancarme un brazo, menos mal que pude esquivar sus enormes fauces, y ya desde el suelo sólo fui capaz de poner los pies por delante asumiendo el trágico desenlace final....El perro, una especie de pitbull o boxer enorme de color verdoso me miró a los ojos con sorna, babeando ya casi que paladeando mi dulce carne...Cuando ya tenía los ojos cerrados la bestia pareció controlada y pude ver a su dueño que me observaba fingiendo algo de preocupación...no sé si el dueño debió pensar que yo era un paparazzi porque no era otro que Francisco Rivera Ordoñez (el perro era catorce veces el de la foto), hermano mayor de Kiko y novio de la sobrina de la Duquesa de Alba...Fran tío ten un poco de cuidado y manda al perro ese para el campo en Sevilla que esa no es bestia para Madrid...entiendo el acoso de la prensa, pero ¿Qué culpa tenemos los ciudadanos corrientes de que vendas exclusivas?
Dios, después de ver a la muerte de tan cerca me he propuesto aprovechar cada minuto de la vida, por eso estoy ahora delante de la TV esperando a que salga Pilar Rubio...
besos
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